El calor en los sólidos se transmite por conducción; por ejemplo un caldero al fuego sabemos que nos puede quemar porque el sólido (metal) es un buen conductor del calor, pero en los fluidos, es decir, en líquidos y gases, la principal forma de transmisión del calor es la convección. En la convección el material caliente se desplaza y tiende a ascender. La porción caliente del fluido sube hacia regiones más frías y cede energía a las zonas vecinas enfriándose. El material frío se hunde hacia las partes bajas y la zona que ocupaba el material caliente es «invadida» por el material más frio. Es por esto que se establecen unos ciclos o corrientes de convección. 
En la naturaleza esta forma de transmisión de calor es la que origina el movimiento de las placas tectónicas y por lo tanto la responsable, en cierto modo, de los terremotos y volcanes, pero también por corrientes de convección se originan los vientos o las corrientes oceánicas.

Los alumnos de 2º de ESO han querido demostrar con un experimento y su presentación en vídeo la existencia de estas corrientes de convección y para ello han puesto primero agua teñida a la misma temperatura tanto dentro como fuera del recipiente y se observa que no existe una tendencia a salir pero luego han calentado el agua teñida y se puede comprobar cómo ahora sí que, debido a la temperatura, el agua caliente tiende a subir.
He hecho una selección con los 4 mejores grupos: y aquí están los resultados:
El siguiente vídeo, aunque es un poco largo, también demuestra el mismo proceso
En este otro, faltó el «control» es decir, faltó hacer la experiencia con agua a la misma temperatura tanto teñida como sin teñir, pero aún así y teniendo en cuenta que ya ha sido demostrado en vídeos anteriores subo éste porque se ve de manera muy clara la corriente de convección.
Sólo falta nombrar que hay alguna que otra falta de ortografía pero que se han comprometido a no tener más en sucesivos vídeos.